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Puente del Cadí

Puente del Cadí

Puente del Cadí
El conocido como Puente del Cadí es en realidad el monumental y romántico vestigio de una gran puerta-puente, ubicada junto al Bañuelo, en la margen izquierda del Darro. El primitivo Puente del Cadí estuvo ubicado junto a la mezquita Almanzora, hoy iglesia de San Gil y Santa Ana. Construido en 1055, con la intervención de Ali Ibn Mohammad Ibn Tawba por encargo del rey zirí Baddis Ibn Habbus; de ahí el nombre de Qantarat al-Qaid ibn Tawba o Puente del Cadí. En el XVI pasó a denominarse Puente de Santa Ana, y desapareció prácticamente tras una riada en 1835. Lo que hoy denominamos como Puente del Cadí era conocido en época nazarí como la Puerta de los Tableros (Bab-al Difaf), o Puerta de los Adufes, Panderos o Tamboriles. Su función era la de enlazar dos corachas o espolones murados para alcanzar el suministro de agua, a derecha e izquierda del Darro, con la Alcazaba Qadima o Vieja del Albayzín y la Alcazaba Yidida o Nueva de la Alhambra. Al mismo tiempo, era la ruta de comunicación entre aquel populoso y levantisco barrio con la propia ciudad palatina, a través de la Puerta de las Armas, acceso principal al recinto alhambreño hasta que a partir de 1492 se primó el acceso por la Puerta de la Justicia.
Puente
Este puente es magnífico, no solo por la monumentalidad de sus dimensiones, sino por las soluciones constructivas que emplea y el estudiado sistema de ingeniería para represar el agua y permitir el acceso a ella desde la muralla, salvaguardando a la vez las condiciones defensivas y de seguridad de la misma.
Reconstrucción
El estribo derecho del puente impedía abrir la calle de la Carrera del Darro, conectando los palacios y edificios que allí se levantaron tras la conquista de Granada, con el centro de la ciudad y el entorno de la catedral. Al quitar el estribo derecho, el resto del puente, salvo el arranque pegado al estribo izquierdo, hubo de ser también demolido por falta de sustentación
Accesos
Al río se accede por dos escaleras pentagonales construidas en el interior del estribo, que confluyen en una puerta adintelada que se abre al agua. El dintel está construido con dovelas que fugan hacia un punto en medio de la puerta. La puerta en la actualidad está tapiada con ladrillo, pero permite observar el hueco que ocupaba. Además también son patentes dos acanaladuras que recorren el intradós del arco y de las jambas de arriba abajo, y que servían de guía para deslizar los tableros de cierre de la puerta, de los cuales había dos, uno a cada lado de la puerta.

Pilar Puente del Cadí

Estribo
Desde lo alto del estribo podemos comprobar la altura impresionante que tendría la Puerta-Puente sobre el río, así como los restos del paño de muralla que se unía al mismo
Accesos
El soporte del estribo hexagonal ofrece un diseño que refuerza la construcción y su estabilidad, así como su comportamiento más hidrodinámico que una planta rectangular en caso de avenidas. Este diseño permite la inclusión interior de dos escaleras de bajada al nivel del agua. El agua era un elemento esencial por su utilización para usos domésticos y de riegos en la Granada zirí, de manera que se hacía imprescindible garantizar su acceso, y una doble escalera permite más capacidad. Pero para ello hubo que alargar los lados centrales del hexágono, al dividirla en dos mitades, que obligarían a la forma de la misma. Este no podía ser un pentágono regular, al no ajustar los ángulos del pentágono (108º) con los del hexágono en el que estaría acomodado (de 120º), debilitando además la resistencia de la construcción.