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Ayuntamiento

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El instante preciso
El instante preciso es una obra del pintor, diseñador de arquitecturas y escultor tarifeño Guillermo Pérez Villalta del año 2002, que está materializada en bronce por Ramiro Megías, a partir de un dibujo suyo. En ella se muestra un caballo en inestable equilibrio en tres de sus patas, apoyadas sobre otras tantas esferas doradas. El jinete que lo monta, sin silla y con los ojos vendados, sostiene asimismo una esfera dorada en su brazo levantado. Es una escultura ecuestre monumental en donde destacan las cuatro esferas que imprimen al conjunto una poderosa sensación de perfección y precario equilibro. La escultura corona la fachada del Ayuntamiento de Granada, bajo la que se dispone el reloj del mismo.
Reloj
La escultura enmarca el reloj de la fachada del Ayuntamiento que es circular, remodelado con números romanos y una inscripción de la pluma de Antonio Carvajal, en relación a la escultura: “Feliz quien ve sus horas en dorado presente”.
Esferas
La esfera ha estado siempre conceptualmente asociada a la perfección. No solo por su forma geométrica, sino también por sus cualidades, que minimizan la superficie de la misma para un volumen dado. Esta optimalidad la hace ser un objeto onmipresente, tanto en la naturaleza, donde es la forma preferida, desde las gotas de agua, hasta los planetas. Pero también en el arte, en donde aparece con frecuencia asociada a la complejidad y la pureza de las formas, la esfera es básica y recurrente. Símbolo de poder, o más sencillamente representando al mundo y el dominio sobre él, tal como aparece en las coronas de casas reales y emperadores, el “globus cruciger” o el orbe del mundo.
El dibujo modelo para la escultura
La escultura muestra la plenitud de las esferas y su inestable equilibrio. El dibujo sobre el que está basado es un cuidado estudio de Pérez Villalta, que es considerado pintor geómetra, quien retoma la esfera como objeto geométrico básico y lo redefine, añadiéndole un aspecto de equilibrio precario que remite a la fugacidad del tiempo, a su inestabilidad.
Análisis del equilibrio
El conjunto ofrece una apariencia estática que no es real. Una mirada global nos muestra que esa posición inverosímil de equilibrio del caballo sobre las esferas está a punto de perderse. De hecho, si consideramos lo adelantada que está la esfera que sostiene el jinete en su brazo derecho comprendemos que no es que el equilibrio sea precario, sino que ha empezado a perderse ya. Caballo y jinete están en el momento en que empieza la caída, dada la perdida de equilibrio que representa la posición alta y adelantada de la esfera superior. Es una caída sutil, que no se muestra con el estrépito del derrumbe de los cuerpos, sino con la razón del cálculo de las condiciones de equilibrio.