La Universidad de Sevilla analiza el impacto de la huella ecológica en la edificación andaluza
Fuente: Vicerrectorado de Investigación. Universidad de Sevilla.
Un estudio de la Universidad de Sevilla trata de evaluar el impacto medio ambiental y económico del sector de la edificación de uso residencial en la comunidad andaluza a partir del indicador de la huella ecológica. Esta investigación pionera a nivel nacional al fusionar ambos parámetros (el económico y el medioambiental), establece una metodología de cálculo para observar las ventajas e inconvenientes que puede generar este indicador respecto a otros.
La investigación, dirigida por el catedrático Antonio Ramírez de Arellano Agudo y realizada por el profesor de la US, Jaime Solís Guzmán, se centra en el sector residencial de la edificación, analiza la fase de construcción de los edificios y establece de forma cuantitativa qué impactos genera dicha actividad según el indicador. La metodología de cálculo aplica el indicador a los recursos (energía, agua, mano de obra, materiales de construcción, etc) empleados y los residuos generados en el proceso de construcción de la edificación residencial, obteniendo qué extensión de superficie equivalente sería necesaria para suministrar esos recursos y absorber esos residuos.
“La huella ecológica es considerada en la actualidad uno de los indicadores más relevantes para evaluar los impactos generados sobre el medio ambiente, y puede ser usado conjuntamente con otros indicadores, como la huella de carbono”, afirma Solís Guzmán. Así, la huella ecológica se ha empleado para evaluar impactos ambientales de muy diversas escalas: Planeta Tierra, países, ciudades, barrios, industrias, etc., y entre las ventajas que aporta hay que citar la integración del consumo de recursos y generación de residuos en un único indicador, la facilidad para ser interpretado desde un punto visual o el uso como potente herramienta de planificación urbanística.
Esta tesis titulada “Evaluación de la huella ecológica del sector edificación (uso residencial) en la comunidad andaluza”, inscrita en el Departamento de Construcciones Arquitectónicas II (Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Edificación) y leída en 2011, obtuvo la calificación de Sobresaliente cum laude y recientemente ha recibido el premio Extraordinario de Doctorado por la Universidad de Sevilla. De dicha tesis ha surgido el proyecto de investigación denominado “Evaluación de la huella ecológica de la edificación en el sector residencial en España”, financiado dentro de la convocatoria del Plan Nacional de I+D del Ministerio de Ciencia e Innovación (BIA2011-25812). Dicho proyecto se está desarrollando en la actualidad y pretende aplicar la metodología generada en la tesis a distintas tipologías edificatorias construidas en España. Su responsable es la profesora Madelyn Marrero Meléndez y en él participa también el profesor Jaime Solís Guzmán. Asimismo, todos los investigadores del proyecto forman parte del grupo de investigación ARDITEC (Arquitectura: Diseño y Técnica).
Como resultado de la tesis se ha publicado recientemente un artículo en la revista Ecological Indicatorstitulado “Methodology for determining the ecological footprint of the construction of residential buildings in Andalusia (Spain)”.
Últimas publicaciones
Un equipo de investigación andaluz junto con expertos de Reino Unido comprueba que el contenido en compuestos antioxidantes de estos organismos marinos mitiga la emisión de metano hasta un 40%, en una digestión simulada en rumiantes.
Sigue leyendoUn equipo de investigación del Instituto de Agricultura Sostenible de Córdoba (IAS-CSIC) ha analizado más de un centenar de muestras de quinoa cultivada en Andalucía y Extremadura durante dos años. El estudio ha demostrado que tanto el contenido de antioxidantes como grasas saludables depende en gran medida de la genética de la planta, lo que permitirá seleccionar aquellas variedades con mayor valor nutricional que mejor se adapten al clima del sur de España.
Un equipo de investigación de la Estación Experimental el Zaidín de Granada (CSIC), del Centro Tecnológico EnergyLab y de la Universidad de Copenhague ha aplicado una solución a partir de residuos vegetales para reducir la liberación de sustancias nocivas de los desechos de la ganadería porcina. El hallazgo ofrece una alternativa al uso de productos químicos agresivos y abre la puerta a nuevas formas de gestionar el estiércol con menor impacto ambiental.