VOLVER

Share

Estudian la repercusión del cambio horario en la salud

Investigadores del Instituto Maimónides de Investigación Biomédica de Córdoba (IMIBIC) destacan que factores como la edad, género y el ritmo circadiano endógeno (cronotipo) determinan en gran medida la capacidad de sincronización de la persona ante las alteraciones generadas por el cambio horario. Además, algunos estudios muestran que aquellas personas con cronotipos vespertinos tienen más problemas de sincronización en el cambio horario de primavera, mientras que aquellas con un cronotipo matutino lo hacen en el cambio horario de invierno.

Fuente: Instituto Maimónides de Investigación Biomédica de Córdoba (IMIBIC)


Córdoba |
01 de abril de 2019

El grupo de Enfermería del Instituto Maimónides de Investigación Biomédica de Córdoba (IMIBIC) ha estado trabajando, junto con expertos internacionales de la Università degli studi di Ferrara (Italia) y la University of Texas at Austin (Estados Unidos), para conocer mejor la influencia que ejercen las alteraciones de los ritmos biológicos en la salud de las personas. En concreto, el grupo IMIBIC-GA02: ‘Cuidados enfermeros integrales. Perspectiva multidisciplinar’, cuenta con una línea de investigación consolidada de ‘Cronobiología’ que aborda los efectos de los principales agentes que alteran los ritmos biológicos en la salud humana.

Miembros del grupo IMIBIC-GA02 “Cuidados enfermeros integrales. Perspectiva multidisciplinar”.

Tal y como se destacó en la propuesta del 12 de septiembre de 2018 de la Directiva del Parlamento Europeo y del Consejo de Europa, para la eliminación de los cambios de hora estacionales y por la que se derogaría la Directiva 2000/84/CE, es de gran relevancia llevar a cabo estudios cronobiológicos que permitan conocer el impacto de esta medida en los ritmos biológicos humanos.

En este sentido, el Prof. Dr. Pablo Jesús López Soto, investigador principal de esta línea y profesor de la Universidad de Córdoba recalca que factores tales como la edad, género y el ritmo circadiano endógeno (cronotipo) determinan en gran medida la capacidad de sincronización de la persona ante las alteraciones generadas por el cambio horario. Así, cada persona tiene un cronotipo, principalmente ligado a los diferentes ciclos de sueño-vigilia. Algunos estudios muestran que aquellas personas con cronotipos vespertinos tienen más problemas de sincronización en el cambio horario de primavera, mientras que aquellas con un cronotipo matutino presentan mayores problemas en el cambio horario de invierno.

El cambio horario, junto con los turnos de trabajo y los viajes  con distinta zona horaria (jet lag), son los principales factores que interfieren en los ciclos circadianos en los seres humanos. Aunque existe cierta incertidumbre sobre la similitud en el impacto del jet lag y el cambio horario en los ritmos biológicos, hay diferencias considerables, siendo el tiempo interno subjetivo una variable a considerar.

El cambio horario, junto con los turnos de trabajo y los viajes con distinta zona horaria (jet lag), son los principales factores que interfieren en los ciclos circadianos en los seres humanos.

El cambio horario puede afectar de múltiples formas a la persona, predisponiendo al desarrollo de enfermedades mentales, enfermedades cardiovasculares, obesidad, diabetes, debilidad muscular, inflamación, e incluso, cáncer. Además, se ha visto su implicación en los accidentes de tráfico o en las visitas hospitalarias.

Hoy en día, a pesar de la propuesta previa, la Comisión Europea sigue buscando evidencias que den respuesta a este debate público. Con estas miras, el grupo IMIBIC-GA02 sigue trabajando a fin de que el sí o el no a una decisión que, entre otros importantes aspectos, afecta a la Salud, venga sustentada por la evidencia.

Desde 2001, las disposiciones sobre la hora de verano se han regido por la Directiva Europea 2000/84/CE, la cual establece la obligación para todos los Estados miembros de iniciar el período de la hora de verano el último domingo de marzo y volver a su hora oficial (hora de invierno) el último domingo de Octubre.  Si bien, el pasado 8 de Febrero de 2018, el Parlamento Europeo aprobó una resolución (384 votos a favor, 153 en contra y 12 abstenciones) (Resolución del Parlamento Europeo: B8-0070/2018 / P8_TA-PROVE(2018) 0043, de 8 de febrero de 2018), promovida por una iniciativa popular, de la necesidad de realizar, tanto la Comisión Europea como la Comunidad Científica, una completa evaluación y en profundidad de lo que supone desde todas las perspectivas (humanas, económicas, de salud…) el cambio bianual de hora, conocido como Daylight Saving Time.


Share

Últimas publicaciones

Diseñan un bioplástico con extracto de hoja de mango que retrasa la oxidación de los alimentos
Cádiz | 25 de octubre de 2025

Investigadores de la Universidad de Cádiz han desarrollado una película biodegradable que aprovecha los compuestos naturales de este residuo agrícola para proteger los alimentos frente al deterioro. Con esta innovación se avanza hacia envases más sostenibles, que reducen tanto la dependencia del plástico convencional como el desperdicio de recursos en el campo.

Sigue leyendo
La madrugada del domingo a las tres los relojes se atrasarán una hora
24 de octubre de 2025

Como publica el Real Instituto y Observatorio de la Armada en su web, la madrugada del domingo 26 de octubre, a las tres (las dos en Canarias), los relojes se atrasarán una hora y volverán a ser las dos. A partir de este día las jornadas serán más cortas en términos de luz diurna. Esta medida, que está regulada por directivas de la Unión Europea y es obligatoria para todos los países miembros, tiene defensores y detractores entre la propia comunidad investigadora y ha sido objeto de estudios científicos. Esté a favor o en contra de ella, el domingo no olvide comprobar que su reloj y otros dispositivos móviles se han ajustado al horario de invierno. 

Sigue leyendo
Un trabajo de la UPO revela que la educación de las mujeres impulsa su presencia en política
Sevilla | 23 de octubre de 2025

Un estudio con participación de la Universidad Pablo de Olavide demuestra que elevar el nivel educativo femenino aumenta de forma significativa la representación política de las mujeres en los parlamentos regionales europeos.

Sigue leyendo

#CienciaDirecta

Tu fuente de noticias sobre ciencia andaluza

Más información Suscríbete

Ir al contenido