Los estudiantes que viven en el mismo barrio ‘se contagian’ a la hora de decidir si ir andando al instituto
Investigadores de la Universidad de Granada determinan, utilizando técnicas geoestadísticas, que no solo la distancia al centro educativo determina el área de influencia de éstos. Además de la cercanía o no entre la vivienda y el centro escolar influyen otros factores del entorno y el posible ‘contagio’ espacial entre las familias.
Fuente: Universidad de Granada
Todos los años por estas fechas, las familias con hijos en edad de escolarización se han debido enfrentar al problema de buscar un centro educativo para el siguiente curso escolar. Debido a la fuerte demanda que tienen algunos centros, los organismos tienen que baremar en función de las características familiares. Una de las características a baremar es la localización de la vivienda. En nuestra comunidad autónoma, por ejemplo, la Junta de Andalucía ha establecido unas zonas o áreas de influencia para cada centro educativo.
Utilizando técnicas geoestadísticas, los investigadores de la Universidad de Granada (UGR) Jorge Chica Olmo, Carlos Rodríguez-López y Palma Chillón han obtenido las zonas de influencia de algunos centros escolares, las cuales vienen determinadas por la decisión de ir al centro escolar andando.
Esta decisión se ha considerado que depende de la distancia entre la vivienda y el centro escolar. Pero, como indica el autor principal, Jorge Chica Olmo, investigador del departamento de Métodos Cuantitativos para la Economía y la Empresa de la UGR, “también influyen otros factores del entorno y el posible ‘contagio’ espacial entre las familias”. Esto último significa que familias que viven próximas en el espacio tienden a tomar decisiones parecidas.
Además, los autores de este trabajo consideran que “uno de los aspectos considerados para determinar las zonas de influencia de un colegio es la distancia al centro educativo. Este aspecto es fundamental para los individuos a la hora de decidir si ir al centro educativo andando o utilizar algún medio de transporte motorizado”. Por otro lado, afirman que “incentivar a los hijos a ir a los centros educativos andando tiene evidentes ventajas medioambientales y sobre la salud integral de los mismos y los familiares que los acompañan”.
Últimas publicaciones
Investigadores de la Universidad de Cádiz han desarrollado una película biodegradable que aprovecha los compuestos naturales de este residuo agrícola para proteger los alimentos frente al deterioro. Con esta innovación se avanza hacia envases más sostenibles, que reducen tanto la dependencia del plástico convencional como el desperdicio de recursos en el campo.
Como publica el Real Instituto y Observatorio de la Armada en su web, la madrugada del domingo 26 de octubre, a las tres (las dos en Canarias), los relojes se atrasarán una hora y volverán a ser las dos. A partir de este día las jornadas serán más cortas en términos de luz diurna. Esta medida, que está regulada por directivas de la Unión Europea y es obligatoria para todos los países miembros, tiene defensores y detractores entre la propia comunidad investigadora y ha sido objeto de estudios científicos. Esté a favor o en contra de ella, el domingo no olvide comprobar que su reloj y otros dispositivos móviles se han ajustado al horario de invierno.
Sigue leyendoUn estudio con participación de la Universidad Pablo de Olavide demuestra que elevar el nivel educativo femenino aumenta de forma significativa la representación política de las mujeres en los parlamentos regionales europeos.
Sigue leyendo


