VOLVER

Share

Descubren el virus más grande del mundo

Fuente: SINC


19 de julio de 2013

El descubrimiento de un nuevo virus que se sitúa como el más grande del mundo, tanto en tamaño físico como en su genoma, cuestiona los límites del mundo viral. Los Pandoravirus, nombre propuesto para este nuevo género, infectan protistas, tienen forma ovoidal y son del tamaño de los eucariotas parasíticos más pequeños. Se han encontrado en Chile y Australia.

Hace diez años, cuando se encontraron los primeros virus gigantes, se comenzó a cuestionar cuál era el mayor tamaño que podían alcanzar y cómo de grande podía llegar a ser el genoma de estos agentes infecciosos.

Ahora, ha sido identificado un nuevo virus gigante que le arrebata a Megavirus chilensis el título de virus más grande del mundo. Pandoravirus es el género propuesto para estos nuevos gigantes, tan grandes que son visibles al microscopio óptico convencional y con un genoma que supera el de muchas bacterias.

“Encontrar esta nueva familia de virus con genomas del tamaño de los eucariotas parasíticos más pequeños nos está indicando que podría no haber límites al genoma y la complejidad de estos virus gigantes”, explica a SINC Chantal Abergel, una de las investigadoras que ha colaborado en el trabajo que se publica hoy en la revista Science.

Los científicos buscaban nuevos miembros de las familias de virus gigantes ya conocidas y se encontraron con dos especies totalmente diferentes.

Pandoravirus dulcis, encontrada en un lago en Australia, y Pandoravirus salinus, identificado en sedimento marino en Chile, son según Abergel “los primeros virus gigantes no icosaédricos, tienen una forma ovoidal que se asemeja al de algunas bacterias”. Además, según el estudio, el 93% de los genes de Pandoravirus no se parecen a nada conocido.

Un virus de una milésima de milímetro

Mientras el anterior récord de tamaño lo ostentaba Megavirus chilensis con 0,7 micrómetros (milésima de milímetro) y un genoma de 1,26 megabases, P.salinus y P. dulcis alcanzan un micrómetro de tamaño, por lo que son visibles al microscopio óptico.

Sus genomas, de 2,5 megabases (P.salinus) y 1,9 megabases (P. dulcis), superan al de muchas bacterias y alcanzan el de algunos eucariotas parasíticos. “El material genético de P. salinus incluiría unos 2.500 genes, y el de P. dulcis unos 1.900” indica el investigador.

Los dos son capaces de infectar a Acanthamoeba, uno de los protistas más comunes del suelo y, según el estudio, el ciclo de replicación duraría entre 10 y 15 horas.

La bibliografía indica que ya habían sido observados miembros de este grupo hace 13 años, pero no se les había identificado como virus. “Los denominaron endosimbiontes y probablemente pensaron que eran bacterias ya que Acanthamoeba normalmente se alimenta de ellas”, explica Abergel.

Referencia bibliográfica:

N. Philippe; M. Legendre; G. Doutre; Y. Couté; O. Poirot; M. Lescot; D. Arslan; V. Seltzer; L. Bertaux; C. Bruley; J. Garin; J.-M. Claverie; C. Abergel N. “Pandoraviruses: Amoeba Viruses with Genomes up to 2.5 Mb Reaching That of Parasitic Eukaryotes» Science Julio 2013, doi: 10.1126/science.1239181


Share

Últimas publicaciones

Confirman la seguridad ambiental de los extractos de naranja y canela como biopesticidas
Almería | 19 de julio de 2025

Un equipo de investigación de la Universidad de Almería ha confirmado que unos compuestos naturales incluidos en productos de control biológico de plagas en cultivos, no generan toxicidad. Los resultados del estudio garantizan así su uso para una agricultura sostenible.

Sigue leyendo
Nueva diana terapéutica para recuperar la capacidad locomotora tras una lesión medular
Sevilla | 17 de julio de 2025

Investigadores de la Universidad Pablo de Olavide colaboran en un estudio pionero liderado por el Centro de Investigación Príncipe Felipe que acelera la recuperación en animales tras una lesión medular y que tiene su base en la molécula AMPc. 

Sigue leyendo
Investigadores desarrollan compuestos con potencial terapéutico contra el cáncer de mama tripe negativo
Granada | 16 de julio de 2025

El estudio, publicado en la revista Bioorganic Chemistry, identifica moléculas capaces de bloquear una interacción clave en la progresión de este tipo de tumor. La investigación se ha centrado en el cáncer de mama triple negativo, un subtipo que no responde a los tratamientos hormonales convencionales ni a terapias dirigidas a otros receptores habituales, lo que limita gravemente las opciones terapéuticas.

Sigue leyendo

#CienciaDirecta

Tu fuente de noticias sobre ciencia andaluza

Más información Suscríbete

Ir al contenido