VOLVER

Share

EXPERTOS DE LA UNIVERSIDAD PABLO DE OLAVIDE DEMUESTRAN QUE LA PRÁCTICA DE EJERCICIO AYUDA A PREVENIR EL ALZHEIMER


14 de marzo de 2011

Fuente: InnovaPress

 

El ejercicio físico tiene un efecto indirecto en el proceso de formación de neuronas en el cerebro adulto, según los resultados de un estudio publicado en la revista Plos One por investigadores de la División de Neurociencias de la Universidad Pablo Olavide. El estudio ha contado también con la participación del Instituto Catalán de Bioingeniería, el Departamento de Biología Celular de la Universidad de Barcelona y el Centro de Investigación Biomédica en Red de Enfermedades Neurodegenerativas (CIBERNED).

Este proceso de formación de neuronas, denominado neurogénesis «se ve favorecido gracias al entrenamiento en edades tempranas», explica el director de la División de Neurociencias y Catedrático de Fisiología de la Olavide, José María Delgado. Por el contrario, «cuando el individuo es adulto, ni el entrenamiento, ni el aprendizaje afectan a la formación de nuevas neuronas. Es necesario actuar en etapas tempranas para conseguir mejores resultados. De igual manera es importante continuar con la práctica de ejercicio a lo largo de toda la vida del individuo por los numerosos beneficios que reporta para la salud», destaca el investigador.

Según sugiere otro estudio, en el que participan neurocientíficos de la UPO -junto al Instituto de Investigación Biomédica de Barcelona (IIBB), la Universidad Autónoma de Barcelona y la Universidad de California-, el ejercicio físico y las tareas mentales, realizadas en ratones modelo de Alzheimer, facilitan el proceso de aprendizaje y memoria retrasando el desarrollo de la enfermedad. «El objetivo era ver si en ratones en los que se simula la enfermedad de Alzheimer se podían mejorar las condiciones sin usar ningún fármaco ni aplicarles ningún tratamiento, únicamente a través de pruebas de ejercicio físico y aprendizaje», apunta Delgado. Para simular la enfermedad de Alzheimer, se implantaron genes que expresan las proteínas Beta-amiloide, TAU y PS1 en los ratones del estudio, cuyos niveles se ven incrementados en personas con enfermedad de Alzheimer.

El investigador indica que «a pesar de que no es posible frenar el desarrollo de la enfermedad, la práctica de ejercicio puede disminuir la intensidad de los síntomas, ralentizando el avance de pérdida de memoria». Alteraciones cognitivas propias del Alzheimer como la pérdida de memoria, ansiedad, depresión, falta de motivación y apatía, pueden verse atenuadas gracias al efecto neuroprotector que produce la práctica de ejercicio físico.

Los resultados de esta línea de investigación quedan enmarcados en el Proyecto de Excelencia Mecanismos que subyacen al aprendizaje y la memoria: un estudio en ratones silvestres y transgénicos, incentivado por la Junta de Andalucía.


Share

Últimas publicaciones

Crean un acelerador de modelos de inteligencia artificial hasta un 70% más rápido con menos datos
Cádiz | 05 de julio de 2025

Un equipo de investigación de la Universidad de Cádiz ha creado REDIBAGG, un método que acelera el entrenamiento de modelos de inteligencia artificial hasta un 70%, al utilizar menos datos pero sin perder precisión. La técnica tiene potencial para analizar grandes volúmenes de información en campos tan diversos como la medicina, la industria o las finanzas.

Sigue leyendo
Diseñan un método rápido y eficaz para medir las prácticas que conservan la dehesa
Córdoba | 03 de julio de 2025

Un equipo de la Universidad de Córdoba en colaboración con otras entidades y equipos de investigación de España y Portugal,  desarrolla un nuevo método que permite evaluar de manera sencilla el estado de calidad de las dehesas en función de una serie de buenas prácticas relacionadas con la biodiversidad, la productividad de los pastos o el manejo de la arboleda.

Sigue leyendo
Un estudio revela que el ayuno intermitente impulsa la memoria y la atención en personas con obesidad
Málaga | 03 de julio de 2025

El ayuno intermitente en días alternos no solo ayuda a adelgazar: un estudio de IBIMA demuestra que este patrón alimentario, al remodelar la microbiota intestinal y frenar la inflamación sistémica, mejora de forma significativa la memoria, la atención y el control inhibitorio en adultos con obesidad. La investigación allana el camino hacia una “nutrición de precisión para el cerebro”.

Sigue leyendo

#CienciaDirecta

Tu fuente de noticias sobre ciencia andaluza

Más información Suscríbete

Ir al contenido