VOLVER

Share

Demuestran la capacidad de las cubiertas vegetales para secuestrar carbono de la atmósfera y reducir la emisión de gases de efecto invernadero

El suelo del olivar mediterráneo tiene una enorme capacidad para secuestrar carbono ya que, durante muchos años, se han empleado malas prácticas que han conllevado la pérdida de CO2, como el laboreo convencional o el no laboreo a base de herbicidas. Como consecuencia, se ha encontrado muy poco carbono estabilizado en suelo en las parcelas de Jaén donde se ha llevado a cabo el estudio, por lo que actualmente existe una gran capacidad de almacenamiento en esta zona. 

Fuente: Universidad de Córdoba


Córdoba |
15 de abril de 2021

Se ha demostrado que el suelo es uno de los mayores reservorios de carbono en los ecosistemas terrestres, ya que en el proceso de secuestro de CO2, contribuye en gran medida a reducir los gases de efector invernadero. En esta premisa se ha basado la tesis doctoral del investigador del Departamento de Química Agrícola, Edafología y Microbiología de la Universidad de Córdoba que trabaja dentro del proyecto europeo Diverfarming Manuel González Rosado.

El investigador Manuel González en el olivar.

El doctor en Edafología y Química Agrícola explica que el suelo del olivar mediterráneo tiene una enorme capacidad para secuestrar carbono ya que, durante muchos años, se han empleado malas prácticas que han conllevado la pérdida de CO2, como el laboreo convencional o el no laboreo a base de herbicidas.

Eso ha derivado en que se haya encontrado muy poco carbono estabilizado en suelo en las parcelas de Jaén donde se ha llevado a cabo el estudio, por lo que actualmente existe una gran capacidad de almacenamiento en esta zona. “Son suelos que tienen un gran potencial, porque existe mucha disponibilidad de almacenamiento, lo cual da la oportunidad de secuestrar carbono y hacer que permanezca, con las prácticas agrícolas adecuadas”, explica González.

Entre los manejos estudiados que ayudan a la captación de carbono se encuentra la introducción de cubiertas vegetales entre las calles del olivar que, además, previenen la erosión del suelo, algo que se dibuja como uno de los principales problemas de los olivares andaluces. El investigador de la UCO explica que, anualmente, se pierden en estos cultivos cantidades por encima de las 10 toneladas desuelo por hectárea y año, especialmente altas cuando se aplican prácticas de no laboreo y suelo desnudo con herbicidas. “Esto podría revertirse con la implementación de cubiertas, ya que la erosión podría llegar a reducirse enormemente”, añade González.

Por eso, considera casi “obligatorio” un cambio de manejo que implique la inclusión de cubiertas vegetales y que aumentan también la productividad y propician la regeneración de las propiedades del suelo mejorándolas. En el extremo opuesto, señala que las prácticas de laboreo convencional y no laboreo con suelo desnudo son insostenibles para conseguir objetivos como los de la iniciativa ‘4 por 1.000’, que propone un incremento de carbono en el suelo de un 0,4% en los primeros 40 cm del suelo.

Sin embargo, su tesis ha ido un paso más allá, estudiando no sólo esta capa superior sino también los demás estratos del suelo. De esta manera, considera muy relevante tener en cuenta el horizonte profundo en el almacenamiento de carbono pues los efectos varían. “Analizamos perfiles completos de hasta 120 cm de profundidad y vimos que se almacenaba casi el 50% de carbono en esas capas inferiores”, explica el investigador, indicando que si sólo se hubieran quedado con los primeros 40 cm “los cambios no habrían sido significativos”.

De hecho, varía el resultado incluso dentro de la misma parcela, en cuestión de la profundidad a la que se haga referencia. Por eso, es importante estudiar la manera en la que el carbono, no sólo se almacena, sino también en la que se mantiene en profundidad, ya que dependiendo de la fracción del suelo en la que se encuentre el carbono tendrá una mayor o menor estabilidad.


Share

Últimas publicaciones

Analizan la relación de bacterias con residuos plásticos agrícolas para combatir su impacto en el campo
Córdoba | 05 de mayo de 2025

Científicos del Instituto de Agricultura Sostenible de Córdoba han diseñado una metodología para analizar por separado los microorganismos que habitan sobre los fragmentos de acolchados plásticos que cubren el suelo en la agricultura intensiva y los que viven en las partículas de tierra que se quedan adheridas. El trabajo podría ayudar a identificar bacterias capaces de degradar este material y contribuir así a la búsqueda de soluciones biológicas para combatir su acumulación en el campo.

Sigue leyendo
Diseñan un sistema inteligente de videovigilancia en tiempo real para aeropuertos
Málaga | 01 de mayo de 2025

Investigadores de la Universidad de Málaga han desarrollado un algoritmo de Inteligencia Artificial (IA) que realiza un agrupamiento no supervisado de objetos similares evitando el etiquetado manual. Este modelo es capaz de detectar una gran diversidad de elementos en la zona de pistas de un aeródromo, desde personas hasta aviones. Otra de las novedades es su optimización para ahorrar tiempo de cálculo y energía en las tareas de identificación, de forma que permite su uso en dispositivos de bajo consumo.

Sigue leyendo
Un nuevo estudio relaciona la exposición a bisfenoles presentes en alimentos con el sobrepeso en niñas
Granada | 30 de abril de 2025

El estudio, liderado por el Instituto de Investigación Biosanitaria de Granada con la participación de la Universidad de Granada, reveló que las niñas con mayor exposición al bisfenol A presentaban un riesgo casi tres veces mayor de desarrollar sobrepeso u obesidad. El hallazgo destaca la necesidad de seguir investigando sobre la relación entre contaminantes ambientales y enfermedades metabólicas para mejorar el bienestar de la población infantil.

Sigue leyendo

#CienciaDirecta

Tu fuente de noticias sobre ciencia andaluza

Más información Suscríbete

404 Not Found

404 Not Found


nginx/1.18.0
Ir al contenido