La Universidad de Córdoba se suma al proyecto ‘Life Lynxconnect’ para crear poblaciones de lince ibérico sostenibles
Un equipo multidisciplinar usará las señales químicas de navegación del lince ibérico para crear corredores artificiales de olor que permitan conectar las distintas poblaciones dentro del proyecto europeo LIFE Lynxconnect, coordinado por la Junta de Andalucía.
Fuente: UCC+i
La conservación del lince ibérico es uno de los objetivos que administraciones públicas y comunidad científica comparten desde hace décadas. Los avances realizados en la creación y protección de poblaciones de lince son un ejemplo de ello.
En este escenario y como continuación de las acciones previas nace el proyecto LIFE Lynxconnect ‘Creación de una metapoblación de lince ibérico (Lynx pardinus) genética y demográficamente funcional’ (LIFE 19NAT/ES001055 LYNXCONNECT) que, financiado por la Unión Europea y liderado por la Junta de Andalucía, tiene por objetivo aumentar tanto el tamaño global de la población como la conectividad entre los núcleos de lince ibérico para asegurar su funcionalidad, autonomía, sostenibilidad y viabilidad.
La Universidad de Córdoba se acaba de sumar al consorcio del LIFE Lynxconnect, formado por 22 socios entre los que se encuentran instituciones de investigación, administraciones, empresas privadas y organizaciones no gubernamentales, que echó a andar en 2020 para, de aquí a 2025 aportar su experiencia y calidad investigadora a la causa.

El equipo de la Universidad de Córdoba que trabajará en el proyecto está liderado por la investigadora Guadalupe Gómez Baena.
El equipo de la Universidad de Córdoba que trabajará en el proyecto está liderado por la investigadora Guadalupe Gómez Baena que, junto a los investigadores Jesús Díez Dapena, Elisa María Espinosa López, Beatriz Ortiz Guisado, Evangelina Rodero y Ana Molina, especialistas en Bioquímica, Etología y Bienestar Animal, trabajarán dentro de la acción 10 del proyecto con un objetivo principal: aprovechar las señales de navegación que usan los linces durante el campeo para crear caminos de olor que conecten las distintas poblaciones. Para ello, los investigadores de la UCO identificarán esas señales químicas, las sintetizarán de forma artificial y pondrán a punto su uso en el campo.
“Uno de los objetivos principales del proyecto es conseguir conectar distintas poblaciones” explica Guadalupe Gómez Baena “si identificamos qué señales usan los animales para moverse por el territorio de campeo y las sintetizamos, podríamos guiar individuos de una población a otra conectando dichas poblaciones mediante el uso de señales que ellos sintetizan de manera natural”.
Este equipo trabajará en el proyecto hasta septiembre de 2025 y dedicará el primer año a completar el análisis a nivel molecular comenzando por los candidatos que ya tienen identificados en marcas de orina y, el segundo año, a realizar los experimentos de campo. La prueba final será crear ese corredor de olor a través de señales artificiales y comprobar si los animales siguen esas señales. Este experimento final tendrá lugar en los Montes de Toledo.
La investigadora resalta que “durante los últimos años, nuestro grupo ha estado estudiando las bases moleculares de la comunicación química en el lince ibérico, aspecto fundamental para comprender el marcaje del territorio y la navegación del lince ibérico en su entorno natural”. Esto se complementa con el conocimiento de los otros miembros de este grupo multidisciplinar sobre comportamiento y bienestar animal.
La creación de estos caminos de olor diseñados por la UCO será una acción más de las que el proyecto LIFE Lynxconnect desarrollará para conectar núcleos que se encuentran en Andalucía, Castilla La Mancha, Extremadura y Vale do Guadiana en Portugal. La conexión de estos núcleos, junto a la creación de dos nuevos núcleos, Sierra Arana en Granada y Altos de Lorca en Murcia, contribuirá a mejorar el estatus demográfico de la especie.
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